La industria de las esmeraldas colombianas: Una mirada a su comercio y desarrollo
El encuentro de berilo y cromo en esmeraldas es, algo así como un milagro natural. Los berilos tienden a ocurrir en las capas superiores y más recientes de roca de la Tierra, mientras que el cromo tiende a ocurrir en el manto mucho más antiguo y profundo. Su unión solo puede ser descrita como un milagro.
La naturaleza es la responsable de este suceso. De acuerdo a la GIA, “como señalaron Giuliani et al. (2015), la esmeralda puede formarse en una variedad de entornos geológicos, pero se encuentra principalmente en tres tipos de depósitos: (1) magmático-metasomático, (2) sedimentario-metasomático y (3) metamórfico-metasomático.
Según los datos de producción mundial de 2005, alrededor del 65 % de la producción provino de ocurrencias magmático-metasomáticas, mientras que alrededor del 28 % fue de depósitos sedimentarios-metasomáticos y el 7 % de tipos metamórficos-metasomáticos (Giuliani et al., 2015)”.
La formación de las esmeraldas se da justamente cuando el agua es sobrecalentada naturalmente, conteniendo cromo disuelto y así se junta contra la corteza ígnea. A medida que estas colisiones se enfrían, se produce un cambio metamórfico en el berilo y así las esmeraldas toman su forma.
En la antigüedad, las minas egipcias suministraban las gemas, pero las principales fuentes hoy en día están en países como Colombia, Zambia y Brasil. Los depósitos de esmeralda de nuestro país, son del tipo sedimentario-metasomático.
Precisamente al ser un fenómeno tan especial, gran parte del prestigio en torno a las piedras preciosas se debe a su rareza. Los diamantes son famosos por tomar temperaturas y presiones increíblemente altas, exprimiendo el carbono en rocas relucientes. Pero en el caso de las esmeraldas, precisamente por sus condiciones geológicas son unas 20 veces más raras que los diamantes.
A diferencia de los diamantes que tienen un sistema de clasificación completo, las esmeraldas en grado de gemas, casi siempre clasifican por cuatro factores: color, claridad, corte y peso en quilates. El color esmeralda es, con mucho, es el factor más importante que establece el valor y la calidad de las esmeraldas naturales.
Es un hecho que su composición química y mineral, contiene la historia de años de geología y algo que se ha adoptado a lo largo de la historia. Como parte de su belleza, la pecularidad de cómo se ve su interior es un encanto adicional. Precisamente en Francia, apodaron las inclusiones de las esmeraldas como jardines, y se clasifican como parte de la calidad única de cada esmeralda.
Cultura y amor
Estas piedras preciosas han figurado en la joyería durante milenios. Tal vez la amante más histórica y famosa de la gema era Cleopatra, a quien se decía que festejaba y se adornaba con estas hermosas joyas verdes.
Sin embargo, las esmeraldas también han sido una parte importante de la tradición de las gemas de la India. Esta antigua cultura asocia las esmeraldas con la sabiduría y el poder, y aún hoy es una de las gemas favoritas personas prestantes de la alta sociedad. En la tradición occidental, se pensaba que el verde de las esmeraldas estaba relacionado con la mitología de Venus, la diosa romana del amor y la belleza que nació del mar.
Esta mitología perdura incluso en las creaciones contemporáneas. En la colección de alta joyería de la casa de diseño Bvlgari de 2022 «Eden, Garden of Wonders» hay una gran cantidad de diseños decorados con esmeraldas increíbles. Una de las piezas más destacadas es el Collar de Venus (foto), que se inspira tanto en el mito como en una planta mediterránea apodada «Pelo de Venus». Cuenta con un diseño de rama y hoja, salpicado de 71,24 quilates de diamantes que con 62 cuentas de esmeraldas suman un peso de 130,77 quilates. En el centro de esta obra de arte, una esmeralda colombiana octogonal de 19,30 quilates se roba todas las miradas.
Por su parte, cuando Cartier presentó el tercer capítulo de su colección de alta joyería Le Voyage Recommencé principios de este año, una pieza de esmeralda formaba parte de su espectacular línea de collares. Llamado Lerro, el diseño presenta líneas simétricas en zigzag de diamantes en el cuello, que culminan en tres bellísimas esmeraldas octogonales provenientes de Colombia.
Pero este año, en la escena mundial, unas nuevas amantes de las esmeraldas se pronunciaron, y de qué manera. La matriarca de la familia Ambani, la señora Nita Ambani hizo “olas” en la internet, gracias a sus impresionantes joyas de esmeralda (foto), presentada en las suntuosas celebraciones de las fiestas de la boda de su hijo Anant Ambani y Radhika Merchant.
Su espectacular collar de dos enormes esmeraldas de hipnótico y natural verde, intrigó el mundo de los amantes de la alta joyería. La Esmeralda rectangular más grande, fue modificada con un tallado escalonado, pesa 562,79 quilates, y la esmeralda más chica, es cuadrada de tallado escalonado con 303,80 quilates. Fueron subastadas por la casa Christie’s en diciembre del 2020. El diseño del collar, por su parte, fue realizado personalmente por Nita Ambani con el apoyo de la prestigiosa joyería Katilal Chhotalal, en Mumbai, India.
La elección de las esmeraldas, tanto de Nita como la de su hija Isha Ambani (Foto), quien también eligió las esmeraldas como su gema insignia, se convirtió en un testimonio del encanto de esta piedra preciosa para el mundo contemporáneo.
Evolución en la industria nacional
En Colombia, gracias al Fondo Nacional de la Esmeralda, ente del Ministerio de Minas y Energía, administrado por FEDESMERALDAS, Fondo creado con el aporte del 1% de la exportación de las esmeraldas colombianas, se construyó, como una organización de naturaleza mixta, el Centro Desarrollo Tecnológico de la Esmeralda, conocido como CDTEC Gemlab uno de los laboratorios más importantes de Latinoamérica, que protege científicamente nuestras esmeraldas.
Si usted quisiera determinar la autenticidad de un diamante, una esmeralda, un zafiro o un rubí, este laboratorio certifica su gema, la identifica plenamente y en el caso de piedras como la esmeralda, puede decirle si es colombiana o no y de qué región del país es. “Gracias a años de investigación, hoy logramos con una exactitud del 98% determinar el origen nacional de una esmeralda. Con esta determinación de origen, en CDTEC, incluso podemos determinar con un 92% de exactitud si proviene de una de las dos principales áreas productoras Cinturón Esmeraldífero Oriental u Occidental. Y avanzamos en un detalle del 85% de exactitud sobre la determinación del distrito minero, por ejemplo, Muzo o Chivor”, subrayó Javier G. Toloza, director del laboratorio.
Esto es revolucionario, ya que este dato resulta lo suficientemente relevante para cuantificar el valor de una esmeralda nacional en mercados internacionales, su origen es determinante en su valor comercial. “No es lo mismo una esmeralda colombiana que otra brasilera o zambiana. Nuestra gema es generalmente un 40% más costosa que cualquier otra esmeralda, lo que posiciona al país, como el productor más importante en márgenes de venta del mundo”, resaltó Óscar Baquero, presidente de Fedesmeraldas.
La tecnificación de la industria esmeraldífera de Colombia también se representa en inversiones sociales que en los dos últimos años, superan los 5 mil millones de pesos, en las distintas regiones productoras. (Conozca aquí algunas de estas inversiones: https://fedesmeraldas.org/fedesmeraldas-en-accion/)
Si bien las esmeraldas son raras y se encuentran especialmente en las joyas de las mejores casas de lujo del mundo, eso no quiere decir que estén completamente fuera del alcance del resto de los terrícolas. Esta piedra preciosa sigue siendo una de las favoritas entre los joyeros y amantes de la joyería hoy en día y su fascinación trasciende fronteras.